Escribir una breve introducción sobre lo que nos ofrece Canadá es literalmente imposible, por el simple hecho de no poder limitar algo infinito.
La industria del esquí en Canadá es sencillamente “endless”, por ello el objetivo de este viaje es tratar de acercar parte de esa magnitud a los esquiadores.
Hace ya más de una década que realicé mi primer viaje de prospección a Canadá, que desencadenó en seis años de exploración y que me han llevado a diseñar la experiencia que representa realizar un viaje de esquí transcanadiense.
Debido a su dimensión hay diversos itinerarios que podemos realizar en Canadá, pero en esta ocasión quiero contaros el que nosotros llamamos comúnmente como el de las gemas escondidas.
Este consiste en un “road trip” de 10 días de duración, partiendo desde el aeropuerto de Kelowna, en el estado de la Columbia Británica.
Una vez en el vehículo rumbo a las montañas es cuando empieza la verdadera aventura, recorriendo las carreteras del “Trans Canadian Trail” flanqueadas por los muros de nieve del arcén, transcurriendo de forma sinuosa sus bosques, lagos y montañas.
Un viaje hacia los mejores escenarios para nuestra pasión, descubriendo tres de las estaciones de esquí pertenecientes a la “Powder Highway”: Whitewater, Red Mountain y Revelstoke, más los pasos de montaña de Kootenay y Roger Pass, mecas del “backcountry” donde realizar jornadas increíbles de esquí de montaña o splitboard, y descubrir sus secretos mejor guardados de la mano de guías expertos.
Por otro lado podrás vivir la increíble experiencia de una jornada heliski y/o de catski (ambas opcionales), representando el sueño de cualquier esquiador avanzado: ascender a las cimas más remotas y salvajes en un helicóptero o en un pisa-nieves adaptado para transportar personas.
Un viaje que impresiona por las dimensiones de su belleza natural y donde alternar en sus animados pueblos del oeste canadiense. Pero sobre todo, habrás esquiado sobre la mejor nieve del planeta.
Vuelo desde la ciudad de origen hasta la ciudad de Kelowna en el estado de British Columbia. Para llegar a Kelowna, hay que volar a las ciudades de Vancouver o Calgary para un posterior vuelo doméstico de aproximadamente 1 hora. Teniendo en cuenta la duración de los vuelos y la diferencia horaria se llegaría en el mismo día (aprox 14 horas de vuelos menos 9 hrs de diferencia horaria) y en el regreso sería al contrario (14 hrs de vuelos más 9 horas más de diferencia horaria).
Una vez en Kelowna se haría el traslado terrestre hasta el pueblo de Nelson, este podría hacerse en el mismo día obteniendo un día más de esquí en el total del viaje o en su defecto pasar noche en Kelowna para realizar el transfer a Nelson al día siguiente.
Un traslado de 346 km por la Columbia Británica en dirección sur y paralelos a la frontera con EEUU, bordeando los estados de Washington y Idaho hasta la población de Nelson en el corazón de las Kootenays, donde alojarse la primera parte del viaje. Un recorrido para empezar a empaparse de esta vasta región de bosques de coníferas y arces, lagos y montañas.
Primer día de esquí para disfrutar de la pequeña estación de esquí de Whitewater. Pequeña si la calificamos por el hecho de que tan sólo tiene tres sillas, pero en contraposición posee un acceso al backcountry increíble, que ni viviendo todo un invierno allí serías capaz de descubrir. Sin duda una de las gemas escondidas del oeste canadiense (estoy seguro que muchos de los locales no estarán contentos de que la saquemos a la luz).
Se encuentra a 21 km de Nelson, los últimos 9 km discurren por una pista hasta el lodge, con impresionantes vistas al pico Ymir y su bowl, que hace las delicias de los riders más intrépidos.
Para el segundo día de esquí que mejor que una jornada de touring en el paso de montaña de Kootenay Pass, perteneciente a las Selkirk Mountains. En su haber, a parte de su amplísimo terreno esquiable con líneas para todos los niveles, es uno de los pasos de montaña de más elevación de Canadá, lo que te permite aparcar a 1.900 m de altura pudiendo acceder a su terreno esquiable con cierta facilidad.
Un traslado de 70 km desde Nelson con un paisaje increíble hasta coronar el paso, si quedan fuerzas y ganas se puede esquiar por la noche en la pequeña estación de Salmo que queda de camino y degustar ricas cervezas artesanales.
Una de las estaciones principales de la famosa “Powder Highway”, situada junto a la población de Rossland. Es una de las 10 estaciones más grandes de Norteamérica con un terreno increíble de 3.850 acres o 1.600 hectáreas y un desnivel vertical de 900 m. Han sido varios los galardones adquiridos en los últimos años, pero sin duda el que más llama la atención es el hecho de que es uno de los resorts con el mejor promedio de terreno por esquiador, debido a no estar masificado, lo que garantiza líneas frescas para todos.
Para el quinto día y de forma opcional os proponemos vivir la increíble experiencia de una jornada de heliski con Stellar o en su defecto vivir una jornada de cat skiing con Big Reg Cats, de los cuales no sentimos orgullosos de ser su agente oficial en España. Para toda la información que requieras saber, visita sus página o consúltanos.
https://stellarheliskiing.com/
https://www.bigredcatskiing.com/
Si se decide no realizar estos planes opcionales, se podría repetir cualquiera de los planes iniciales. Otra posibilidad sería tener un día de descanso, aprovechándolo para realizar el traslado a Revelstoke y de camino disfrutar de las pozas termales naturales junto a la población de Nakusp. En caso de decidir esquiar esta jornada, habría que realizar el traslado a Revelstoke al finalizar la misma.
Revelstoke Mountain Resort situado en Mount Makenzie se enorgullece y con razón de ser la estación de esquí con más desnivel de Norteamérica (1713 m). Por otro lado posee el record canadiense de más precipitación de nieve con 24 metros y con un promedio anual de 11 metros de nieve fresca. La historia del ski en Revelstoke se remonta a los años 60, pero la culminación del proyecto se produjo en Diciembre de 2007 naciendo así lo que hoy conocemos como Revelstoke Mountain Resort, con una área esquiable de 1200 hectáreas. Un terreno que podréis descubrir durante dos días , disfrutando de sus líneas entre árboles, caras abiertas y sus bowls. Más que recomendable culminar el día bajando “The Last Spike” con la puesta de sol y sus vistas al Glaciar Begbie.
Rogers Pass es un paso de alta montaña a través de las montañas Selkirk de la Columbia Británica. Ubicado en el corazón del “Glacier National Park”.
La carretera que nos lleva desde la población de Revelstoke hasta el paso de montaña (1330 m), es la famosa “Trans canada Highway” que cruza Canadá desde la costa este hasta su costa oeste.
Sin duda esta carretera y sus increíbles montañas circundantes que forman parte tanto del Glacier National Park como el Mt Revelstoke National Park, sumado a su calidad y cantidad de nieve nos ofrece sin lugar a dudas uno de los mejores destinos del mundo para el esquí de montaña.
Último día de este increíble viaje, iniciando nuestra vuelta a casa despidiéndonos de estos bellos parajes sin igual.
Un traslado de 197 km hasta la ciudad de Kelowna para embarcar en un vuelo doméstico a la ciudad de Vancouver o Calgary y a posteriori embarcar en un vuelo internacional a vuestras ciudades de origen.
Dependiendo de la hora de vuelo se podría realizar el traslado el día anterior al finalizar la jornada de esquí y pasar la última noche en la ciudad de Kelowna.